Dios nos llama de muchas formas: a través de la creación, por medio de nuestros sentimientos y pensamientos, en las personas que nos rodean; él nos manifiesta su amor y su bondad de muchas maneras.
Hay momentos y lugares especiales en los que podemos encontrarnos con Él para orar, para alabarlo y agradecerle por todo lo bueno que nos da. Esos momentos y lugares, como la Iglesia o los espacios de oración, la catequesis y las celebraciones comunitarias, se convocan en la mayoría de las comunidades por medio de las campanas (aunque en otras partes están cayendo en desuso). Reinterpretar la llamada de las campanas como una invitación de Dios a reunirnos en su nombre, como familia y comunidad, para estar en su presencia y orar juntos, es un recurso importante que conviene rescatar y dar un nuevo sentido.
En el tema de la catequesis se hace referencia a sonidos cotidianos que significan una llamada o una comunicación directa con una persona; es importante insistir que también con Dios podemos comunicarnos y relacionarnos personalmente, hablar con él, escuchar sus llamadas y responder a ellas.
• CD – Sonidos de campanas / celular / teléfono
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